La doctora María Guerrero, Presidenta de la Sociedad Norte, insiste en la necesidad de ampliar la educación sexual y afectiva en los centros escolares
28/02/23
Atribuye a una “injustificada hormonafobia” el bajo nivel de uso de anticonceptivos hormonales en España
Tras saludar al Presidente del Colegio Oficial de Médicos de Burgos, Dr. Joaquín Fernández de Valderrama Benavides, la doctora, ginecóloga del Hospital Universitario de Burgos, destacó la importancia de que se cumpla la Ley de Salud Sexual y Reproductiva, especialmente en sus capítulos iniciales, con referencias concretas a la formación, información y educación para este colectivo. “Se aprecia que las menores de 30 años están más concienciadas frente a infecciones de transmisión sexual y embarazos no deseados, como lo demuestra el hecho de que dos de cada diez jóvenes de entre 20 y 29 años ya usan doble método anticonceptivo en sus relaciones”.La educación sexual y reproductiva ha de ser independiente de la ideología de cada y debe convertirse en una asignatura que no se suspendiera siempre. En la ley de 2010 ya se insiste en su aplicación en los centros escolares, pero no se ha llevado a cabo en la medida exigible. Recordó cómo el preservativo es en España el método anticonceptivo más usado, en tanto que, en países como Francia, la píldora ocupa el primer puesto. “Es necesario reforzar la educación sexual en España para mejorar la información sobre métodos anticonceptivos y su uso correcto, pero también como clave para frenar el crecimiento de la pornografía infantil y la violencia de género”. “La encuesta de la SEC demuestra la idoneidad de una mayor formación en materia sexual y afectiva, especialmente entre los jóvenes además de reclamar facilidades en el acceso a los métodos anticonceptivos”. Se mostró, igualmente, preocupada por el reciente aumento de las enfermedades de transmisión sexual.
María Guerrero abundó en la conveniencia de utilizar la píldora u otro producto de larga duración para evitar una gestación no planificada (como un DIU), acudiendo a la vez al uso del preservativo a fin de minimizar el riesgo de contraer una enfermedad de transmisión sexual. «El doble método es lo recomendado, pero el 71,4% de las mujeres en edad fértil no lo aplican”.
“El bajo nivel de uso de anticonceptivos hormonales en España se atribuye a una “injustificada hormonafobia” que no se da en otros países”. Considera que el bajo uso del doble método (en España no llega al 18%, según el último informe)y quizá se deba a razones culturales. “Todavía hay quien cree que estos tratamientos pueden provocar trombosis o cáncer, cuando eso no es cierto. El empleo de hormonas tiene efectos beneficiosos, como rebajar el sangrado y los dolores menstruales y reducir la aparición de cáncer de ovario o de endometrio”.
También se mostró partidaria de que se apruebe un protocolo que establezca revisiones ginecológicas periódicas para detectar problemas antes de que se agraven. “En este sentido es frecuente que cuando una mujer acude al ginecólogo por algún problema concreto se le detecten otras afecciones que no conocía, que de haberse localizado antes, habrían tenido mejor diagnóstico y un tratamiento más fácil”.