El manifiesto del Día Mundial de la Anticoncepción 2023 centra el foco en la influencia de la salud mental en la sanidad sexual y reproductiva

19/09/23

La declaración anual de FEC y SEC insiste en la necesidad de atajar las numerosas carencias que aún registra la atención a la mujer

L a Fundación Española de Contracepción (FEC) y la Sociedad Española de Contracepción (SEC) celebran, el próximo 29 de septiembre, una nueva edición del Día Mundial de la Anticoncepción. Los actos centrales académicos se desarrollarán en el Círculo de Bellas Artes de Madrid. Con motivo de esta efeméride se hace público un manifiesto al que ya se han sumado numerosas sociedades científicas y profesionales.

En esta oportunidad la declaración de la FEC y SEC defiende y concluye que la Salud Mental forma parte de la Salud Sexual y Reproductiva. Conocida la puesta en marcha de la Estrategia de Salud Mental del Sistema Nacional de Salud para el periodo 2022-2026 se detalla que todo ello tiene que ver con el derecho al disfrute de una sexualidad responsable, alejado de conceptos ideológicos y limitaciones mentales.

Superada en gran medida la pandemia derivada de la Covid-19 el documento aprobado por el Comité Institucional de la Estrategia de Salud Mental y por el Consejo Interterritorial del SMS es un notable paso adelante. Pero queda mucho por hacer. En esta nueva edición del Día Mundial de la Anticoncepción se reclama la atención hacia la Salud Mental relacionada con la Salud Sexual Reproductiva y Anticoncepción.

La Salud Mental, es objetivo a atender especialmente en los casos de IVE. Según un estudio del Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos, las mujeres que sufren un aborto, tienden a culpabilizarse, lo que les hace sentirse aisladas y solas. Al sufrirlo, se multiplican por dos las posibilidades de sufrir depresión y ansiedad y por cuatro el riesgo de suicidio. Cada año se producen 23 millones de abortos espontáneos en todo el mundo, lo que equivale a 44 pérdidas de embarazos cada minuto. Sucede constantemente y, sin embargo, parece que no ocurra nunca. Entre el 15% y el 25% de los embarazos reconocidos clínicamente acaban en aborto. Por todo ello, las demandas derivadas de la modificada Ley Orgánica 2/2010, ha de agregarse la atención profesional a la Salud Mental de la mujer.

En reiteradas ocasiones se han puesto de manifiesto las múltiples insuficiencias que persisten para dar respuesta al cumplimiento de los objetivos de bienestar y salud de las mujeres. Los derechos jurídicamente recuperados en España tras la aprobación de la Ley Orgánica 2/2010, del 3 de marzo, y su modificación con Ley Orgánica 1/2023, de 28 de febrero pasado, no ocultan, sino que revelan las persistentes carencias. Carencias en el acceso público garantizado, universal, gratuito y en igualdad a los servicios y programas de Salud y Sexual y Reproductiva. Carencias en la prevención de las enfermedades e infecciones de transmisión sexual, en notorio aumento durante los últimos años. Carencias en la prevención de embarazos no deseados, especialmente entre los más jóvenes. Carencias en la atención específica a las personas con algún tipo de discapacidad. Carencias en la educación afectivo-sexual en todas sus dimensiones para que realmente forme parte del currículo durante la educación obligatoria. La educación en el respeto a la diversidad son aspectos que necesitamos consolidar.

El manifiesto propugna, a la vez, la igualdad asistencial de todas las mujeres,

la educación en Salud Sexual y Reproductiva, el uso de la Anticoncepción, la recomendación de la utilización del doble método, todo lo cual ayuda a reducir el estrés y la ansiedad asociados con el miedo a un embarazo no deseado, así como a las ITS. Al utilizar métodos anticonceptivos efectivos y seguros, las mujeres alcanzan mayor tranquilidad y se sienten más satisfechas de su vida sexual, lo que ha de contribuir a una mejora en su Salud Mental.

La anticoncepción brinda a las mujeres el poder de tomar decisiones informadas y observar el control sobre su Salud Reproductiva, la capacidad de elegir cuándo tener hijos/as puede mejorar la autoestima, la confianza y la sensación de autonomía. Todo ello provoca un impacto positivo en la Salud Mental.

La anticoncepción eficaz permite planificar y lograr metas personales, educativas o profesionales antes de embarcarse en la crianza de hijos/as. Esto puede llevar a una mayor satisfacción y bienestar general, ya que las mujeres tienen la oportunidad de centrarse en otros aspectos de sus vidas sin preocupaciones constantes sobre embarazos no buscados.